‘Space Force’: la realidad supera la farsa
Salvador Medina
Tras el anuncio del presidente Donald Trump de establecer una rama espacial de la fuerza aérea, las burlas no tardaron en llegar. No sólo el nombre de Space Force fue motivo de múltiples bromas, sino la forma en que se expresó la misión y el lenguaje que utilizó. Es así que Greg Daniels y Steve Carell, el equipo detrás de la versión estadounidense de The Office, se dio a la tarea de ganar la partida y crear una serie inspirada en ello.
Tomando el contexto político actual, con todo y Trump, Carell y Daniels cocrearon Space Force, una satírica serie original de Netflix que exhibe el caos que ronda la Casa Blanca.
En Space Force, el general Mark R. Naird (Carell) es ascendido de grado militar para recibir la encomienda de dirigir la nueva rama del gobierno, con la misión de llegar a la luna en 2024. Lo que parece una buena noticia se torna en un giro dramático dado que Naird pensaba que dirigiría la Fuerza Aérea.
Con su hija adolescente Erin (Diana Silvers) y su esposa Maggie (Lisa Kudrow), debe mudarse a una base abandonada en Colorado y dejar atrás su casa en Washington. Corte a un año después:
La vida de los Naird ha cambiado completamente. Erin, una chica popular y adaptada a su preparatoria, es ahora la burla en su escuela. Y Maggie está luchando con sus propias batallas. Además, la presión de un presidente ignorante y volátil (cuyo nombre nunca es dicho pero la insinuación es obvia), pone a Mark en una presión constante por ganarle la batalla a los chinos.
Daniels y Carell juegan con los estereotipos del panorama actual: desde el ambiente de incompetencia total, pasando por personaje á la Pelosi, Ocasio-Cortez y los ancianos legisladores conservadores que creen que la tierra es plana.
Space Force no deja nada fuera de su panorama y el resultado en ese sentido es genial: pinta a Estados Unidos como un estado fallido, manejado por tipos obsesionados con la guerra y dejando la ciencia y la lógica atrás. Pero no se atreve a ser una farsa absoluta como lo son Veep o Avenue 5. Aquí más bien hay un poco de redención posible en los personajes y, por ello, algo de esperanza en la humanidad.
Pese a ello, Space Force es una comedia con punch y corazón, convirtiéndose inmediatamente en una de las mejores opciones de Netflix.
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