Magic Mike XXL, una secuela sin punch
Salvador Medina @ayudamemalverde
Magic Mike, la película de Steven Soderbergh que sorprendió por su temática, coreografías y valentía, tuvo tal éxito que se aprobó pronto una secuela. Escrita de nuevo por Reid Carolin, Magic Mike XXL recupera la historia donde nos dejó la última vez.
Mike (Channing Tatum) tiene discreto pero exitoso negocio. Lejos de los reflectos, ha sabido rehacer su vida. Pero un llamado de los chicos lo confronta con la posibilidad de revivir un último fin de semana antes de decir adiós para siempre.
Richie (Joe Maganiello), Tarzan (Kevin Nash),Ken (Matt Bomer) y Tito (Adam Rodriguez) ofrecen a Mike dejar a un lado sus responsabilidades y revivir el estilo de vida que por tanto tiempo los unió. Sin Dallas (Matthew McConaughey), el grupo debe rencontrar su mojo, como lo dice el propio Richie. Entra entonces Mike, quien ávido de olvidar un rompimiento personal, les inyecta de nuevas ganas de redefinirse.
El gran problema de Magic Mike XXL no es únicamente su ritmo y que pretenda vivir de las sobras que dejó la original. Sino que intenta demasiado justificarse a sí misma, cuando a todas luces parece un pretexto del estudio por hacer otra película con Tatum.
Además, sin Soderbergh en la silla de director, la película por momentos pierde su ritmo. Magic Mike XXL gana cuando se trata de los chicos hablando de sus planes y proyectos, y pierde cuando se vuelve una reflexión seria, sobre todo porque los personajes se han caricaturizado en este entrega. Parece un guión más bien adaptado a las personalidad de cada actor que una verdadera intención por explorar sus psiques.
Magic Mike XXL no sólo perdió la sorpresa de su antecesor sino también su personalidad. El director Gregory Jacobs es incapaz de recrear el ambiente narrativo que distinguió a la anterior. Y visualmente no es sorprendente.
Una escena donde todos convencen a Richie de hacer reír a una cajera de supermercado es un momento cómico y entretenido. Pero fuera de eso, el espectador verá las mismas secuencias una y otra vez. Y poco más.
Magic Mike XXL no es la secuela que merecía la película de Soderbergh, y mucho una opción refrescante u original para satisfacer el apetito por más Channing Tatum (con o sin ropa).
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