‘La Cabaña Siniestra’ – Reseña
Salvador Medina
El terror es hogar de algunos de los mejores autores de la actualidad. De sus entrañas surgen historias relevantes, tétricas y siempre originales y atrevidas. Es en este género, subestimado, menospreciado, con menor presupuesto, con poca atención, donde verdaderos autores se gestan y consolidan.
Los austriacos Severin Fiala y Veronika Franz, que irrumpieron en el medio con Dulces Sueños Mamá en 2014, regresan cinco años después con una obra que representa lo mejor del género del terror.
The Lodge (La Cabaña Siniestra), coescrita y dirigida por Fiala y Franz, cuenta la historia de una familia en caos. Conocemos a Laura (Alicia Silverstone) dejando a sus hijos en casa de su padre. Pese a que Richard (Richard Armitage) le asegura que no hay nadie más en el lugar, Laura percibe desde antes la presencia de la otra mujer. Los pequeños Aidan (Jaeden Martell) y Mia (Lia McHugh) tampoco pueden soportar a la mujer que separó a la familia, aunque por ahora no sabemos de quién se trata.
Richard la recibe con la noticia de que planea casarse con Grace, la otra mujer, y que necesita que Laura firme el divorcio. Ella le responde esbozando una sonrisa, antes de retirarse a su casa y quitarse la vida. Corte a: seis meses después. Y la familia busca tomar las piezas que quedaron y darles sentidos.
Es así que Richard organiza que pasen la Navidad con Laura en la cabaña a la que solían ir con Grace. Los hijos culpan de todo a ella y es así que revelan la primera pista de lo que habrá de ocurrir: ¿no es su nueva pareja una psicópata? Y es así que nos presentan la historia de Grace: la solitaria sobreviviente de una secta que cometió suicidio.
Pese a la renuencia de Aidan y Lia, Richard organiza el viaje. Y aunque él debe regresar a la ciudad durante dos días, será tiempo suficiente para que se familiaricen con Grace (Riley Keough), mucho más joven que Richard, tímida y retraída, pero ávida de acercarse a los hijos de su nueva pareja.
Para Grace, se tratará de un ritual de paso, sobre todo considerando los recuerdos que en esa cabaña crearon durante años. Pero la partida de Richard provocará que cosas comiencen a suceder en el lugar. Y entre sus medicinas y el trauma que significó su infancia, Grace duda de su cordura.
La Cabaña Siniestra es una aterradora y siniestra obra que explora las cicatrices familiares como método de catarsis. El mejor recurso de Fiala y Franz es esconder todo a simple vista y jugar con el espectador y sus expectativas de la narrativa.
Es la combinación de impecable ejecución y la coherente historia, lo que hacen de La Cabaña Siniestra una obra trascendental del terror.
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