El genio incomprendido de Veep
Salvador Medina
salvador@elhablador.com.mx
Armando Ianucci es un personaje poco conocido en el medio del cine y la televisión pero es sin duda una de las mentes más brillantes para analizar la política y sus matices. Conocido por su inmediato éxito de culto In The Loop de 2009, una sátira de las relaciones diplomáticas, Ianucci posee una voz sutil y una comedia inteligente, que puede pasar desapercibida para el espectador promedio. Sin embargo, Veep, la serie que creó para HBO, es el mejor ejemplo de su capacidad.
Ya en su segunda temporada, Veep cuenta la historia de Selina Meyer, la Vicepresidente del país más poderoso del mundo. Agregado al hecho de que Meyer es un gran personaje, con un impulso propio pero detenida por sus propias torpezas e inseguridades, ayuda inmensamente el hecho de que está interpretado por la subestimada Julia Louis-Dreyfus.
Louis-Dreyfus, mejor conocida por su papel en la popular comedia Seinfeld, ha luchado contra el común síndrome de ser referida como el personaje más popular que ha interpretado. Y es que ciertamente Elaine Benes es uno de los personajes femeninos más importantes en la historia de la televisión. Rompió con los estándares de las mujeres débiles de opinión, atadas sexualmente a un hombre y con falta de ambición. Sin embargo, el éxito de la serie provocó que en lugar de ver el gran trabajo de Julia Louis-Dreyfus, la gente se quedara con Elaine Benes.
Sin embargo, Veep es una gran redención para ello. Y, si lo vemos más de cerca, prácticamente todo el talento de la serie consta de actores subestimados o que nos refieren inmediatamente a papeles anteriores. Anna Chlumsky es mejor conocida por su papel en My Girl (Mi Primer Beso); Tony Hale no puede sacudirse a Buster de Arrested Development; y Matt Walsh ha tenido papeles secundarios toda su carrera donde su inteligencia no es precisamente el atributo más destacado.
Sin embargo, todos han encontrado un gran lugar en Veep. Una serie con estilo casi documental, con una fotografía muy personal que permite al espectador relacionarse más personalmente con las situaciones, es una serie discreta en comparación de los monstruos que han resultado Game of Thrones, Boardwalk Empire y el fenómeno de que resultó Girls. Pero a diferencia de esta última, los guiones de Veep son inteligentes y no subestiman la capacidad del espectador. La sutileza es la mejor característica de Ianucci. Un grato contraste con Dunham cuya mayor forma de sorprender a sus seguidores es desnudarse lo más posible en escena.
Veep no es la serie más popular de HBO pero es sin duda brillante. Esperemos que el respetado canal no cometa el error de cancelarla demasiado pronto como sucedió con Hung y How to Make It In America.
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One Response to El genio incomprendido de Veep
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Bien merecida la nueva temporada de Veep HBO creo que la serie está bien producida y tiene todo lo necesario para cautivar al público, el personaje de Julia Louis-Dreyfus me encanta hacer una manera estupenda que enamorar público con tan sólo ver