El caso en contra de ‘Girls’
Salvador Medina
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Girls comenzó con una gran promesa de refrescar la televisión dirigida a jóvenes, en especial a mujeres. Con la ventaja de producirse para HBO, la serie tenía el potencial de manejar temas y perspectiva sobre la situación actual de los jóvenes en Estados Unidos y en el mundo, con un realismo único y legítimo. Sin embargo, la intención de crear un producto más atrevido que innovador, ha hecho que la calidad de Girls caiga estrepitosamente.
Producida por Judd Apatow (el hombre detrás de Knocked Up y 40 Year Old Virgin) y creada, escrita, protagonizada y a veces dirigida por Lena Dunham, la serie se quedó como una promesa de reflejar con certidumbre lo que significa la transición de elegir una carrera, titularse y buscar un trabajo que pague lo justo para un departamento y tres comidas al día.
Girls es una serie pretenciosa, lineal y principalmente, aburrida. Sus personajes no son relacionables, están llenos de clichés y son bastante mamones. Es cierto, viven principalmente en una situación precaria en la que están contando los días para la próxima renta pero en medio, se involucran en situaciones absurdas que no profundizan en su psique sino que hablan de lo burdos que son y de lo patéticas que son sus personalidades.
El personaje de Lena (Hannah) no es agradable, divertida o siquiera inteligente. Es el ejemplo perfecto de alguien que tiene una vida difícil porque así lo quiere. Está en una terrible relación con un tipo que no hace otra cosa que pensar y hablar de sexo y que no tiene un sólo atributo físico o intelectual.
La bella Allison Williams (Marnie) es el típico ejemplo de una chica superficial, acostumbrada a tener lo que quiere y que habla únicamente de sí misma. Jessa es la típica hipster neoyorquina pretenciosa que no tiene pudor y es egoísta al punto de no importarle sus propias amigas. Shoshanna es el aburrido dibujo de una chica que no tiene idea de cómo funciona el mundo y se pone en situaciones donde cualquier otra persona sabía acomodarse.
Si HBO pensó que sería la situación correcta llenar los espacios que dejaron Bored to Death y How to make it in America con Girls, se equivocó rotundamente. La única buena noticia es que seguramente la serie no tiene futuro. Y eso deja espacio para esperar la siguiente producción que nos haga superar el terrible trago que significa la tediosa Girls.
Ha sido un gran trabajo de Lena Dunham pues no ha ofrecido una serie que si bien es cierto es sencilla pero muy entretenida y divertida. Es de de mis favoritas desde la primera temporada.